Desde hace muchos años, cada Navidad, Alvantia colabora con una maravillosa iniciativa llamada «Reyes Magos de Verdad«. Como nos parece un proyecto tan bonito como necesario, queremos ayudar a darle difusión entre el mayor número de personas posible. Con este objetivo, hemos entrevistado a una de sus coordinadoras, Cristina Goyoaga Schneider, que nos ha contado muchas cosas sobre estos Reyes Magos, que son muy reales:

¿Cuándo y por qué nació este proyecto? ¿En qué consiste?

La fundadora colaboraba haciendo voluntariado en distintos centros y hace 17 años, se dio cuenta de que había muchos niños que no recibían un regalo en Navidad y que ya no creían en la “magia”. Se puso manos a la obra y en poco tiempo, contactando a sus amigos, consiguió 150 juguetes nuevos y un montón de ilusión y magia para 150 niños sin recursos económicos.

Al año siguiente, se juntó con seis amigas y dieron forma a este bonito proyecto: “Reyes Magos de Verdad”. Es un proyecto sin ánimo de lucro en el que colaboran varias personas de forma desinteresada para devolver ilusión a niños, ancianos y personas con habilidades diferentes sin recursos a través de un regalo. Lo importante para estos niños y ancianos no es tanto el regalo como ver que “alguien” les ha escuchado, que se han leído su carta, que son dignos, igual que otros niños o ancianos, de recibir algo especial. Es más importante esa sensación. Es lo que les toca el corazón.

Cuéntanos cómo funciona…

En el mes de octubre, las coordinadoras se ponen en contacto con los centros y parroquias que necesitan ayuda y se les indica que deben ir pidiendo a niños y ancianos que escriban su carta a los Reyes Magos. Hay niños y ancianos que no saben escribir o que ya no pueden y les tienen que ayudar los tutores, hermanos, padres o cuidadores. Se piden 3 regalos por un valor entre 25 y 35€, que es el precio que suelen tener los juguetes más solicitados. 

El 9 de noviembre se abre el plazo de inscripción en nuestra página web. Las personas que quieren convertirse en el Rey Mago de un niño o un anciano, se inscriben. El plazo permanece abierto hasta que todos los niños y ancianos tienen un Rey Mago. El resto va entrando como reserva. Es muy importante inscribirse con una dirección de correo electrónico que funcione y que se utilice constantemente. 

Durante el mes de noviembre, se van recogiendo las cartas de niños y ancianos. Después, escaneamos las cartas. Esto es un proceso lento dado que debemos generar un archivo por carta para que luego cada uno de los Reyes Magos reciba una carta del niño o anciano que del que será Rey Mago.

En diciembre, se envían las instrucciones y las cartas escaneadas a los Reyes Magos regaladores. Es muy importante leerse las instrucciones y sobre todo fijarse en los plazos de entrega que se indican, para que ningún niño o anciano se quede sin regalo. Deben comprar 1 de los 3 regalos pedidos por el niño o anciano, siempre dentro del importe de 25 a 35€. 

Las coordinadoras reciben los regalos (en sus casas, oficinas o en lugares de confianza donde colaboran con Reyes Magos de Verdad). Unos días antes de que finalice el plazo de entrega, se envía un correo electrónico recordatorio para los despistados y a la vez se empieza a contactar con los Reyes Magos regaladores de reserva o de urgencia, a los que se les pide el esfuerzo adicional de comprar el regalo, a veces, de un día para otro.

En la fecha que nos indiquen en el centro o parroquia, y una vez comprobado que están todos los regalos de ese centro, se llevan los regalos donde nos indiquen o vienen a buscarlos. El traslado de regalos implica a veces la colaboración de muchos amigos y familiares, dado que a veces, hay más de 100 niños en un centro y los regalos son muy voluminosos.

Hay algunos centros de niños y ancianos que piden que los Reyes Magos de Oriente o sus pajes vayan a entregar los regalos en persona. En el caso de fiestas de menores, las personas que participan son autorizadas por el centro. La situación de cada niño es diferente. Hay niños que reciben el regalo en casa de acogida, en la cárcel si viven allí con sus madres e incluso en su propia casa, siendo el único regalo que reciben. Y si hay fiesta de entrega de regalos, siempre los llevan los Reyes Magos o sus pajes. Hay que creer en la magia, siempre.

En enero, los Reyes Magos regaladores reciben un correo electrónico de agradecimiento con un vídeo resumen de la campaña. No podemos enviar fotos de un niño en concreto. Son muchos niños y no tenemos forma de identificar a todos en el momento de recibir su regalo. Pero garantizamos que el regalo lo reciben porque ningún niño o anciano se puede quedar sin regalo. También subimos fotos en la página web.

En tu caso, ¿por qué comenzaste a colaborar con Reyes Magos de Verdad?

Yo comencé en el proyecto como coordinadora en el año 2010. El año anterior conocí a una de las fundadoras porque me solicitó (yo trabajaba en una compañía de vehículos de alquiler) una furgoneta para llevar unos regalos a Portugal, a un precio asequible. Conseguí que se la alquilaran de manera gratuita y, junto con mi marido, me fui también a Portugal con ella y otras voluntarias, para ver cómo era el proyecto. Y nos encantó… fue increíble. Al año siguiente me ofrecieron ser coordinadora y empecé en un centro pequeño, con unos 150 regalos. Después, fui cogiendo más regalos y cuando ya tenía más de 600 y no cabían en mi casa, pedí ayuda a la parroquia más cercana, que me cedió su sótano para almacenarlos allí. En 2020, al tener que hacer frente a muchas complicaciones debido a la pandemia, conseguimos que los jesuitas nos cedieran un espacio y desde entonces allí se recogen unos 4.000 regalos cada año, gestionados por varias coordinadoras.

¿Qué te aporta colaborar con este proyecto?

Mi marido y yo no hemos tenido hijos y en Navidad echaba en falta ese amor que das durante unas fechas tan señaladas. Pero, desde que comencé en Reyes Magos de Verdad, estoy dando amor a muchos niños y muchas personas mayores y eso me llena mucho. Para mí la Navidad es Reyes Magos de Verdad. Implica mucho esfuerzo; yo me levanto a las 5:00h. de la mañana para, como yo digo, «reinar» antes de mi jornada laboral y después de la misma vuelvo a trabajar para el proyecto. Pero desde luego merece la pena. Desde 2010, mi marido (que es mi apoyo incondicional en la sombra) y yo llevamos trabajando en esto con muchísima ilusión y hemos comprobado que la magia realmente existe.

¿Cuántas personas colaboran aproximadamente en el proyecto?

Somos un grupo de aproximadamente 85 personas a las que nos une la magia de este proyecto. Personas con vidas normales, trabajo (o no), niños, familia, obligaciones, etc. Personas como vosotros. Dedicamos de tres a cuatro meses al año (intensivos) a este proyecto, renunciando a pasar tiempo con nuestras familias y amigos porque creemos en este proyecto y porque sabemos que merece la pena todo el esfuerzo. Ver las miradas y sonrisas de niños y ancianos llenas de ilusión y agradecimiento nos hace esforzarnos más cada año. Ver que les tocas el corazón hace que nos olvidemos de todo el cansancio y horas sin dormir.

Además, contamos con muchos ayudantes desinteresados como porteros, recepcionistas, amigos que nos ayudan a transportar regalos y a distribuirlos, pajes, Reyes Magos, niños que ayudan a otros niños, empresas que colaboran, gente que nos dona roscones para las fiestas, chuches, etc.

Supongo que habrás vivido cosas muy bonitas durante estos años… ¿recuerdas alguna que te haya marcado especialmente?

Hay muchos milagros, pasan cosas maravillosas. Por ejemplo, en uno de los años, un niño pidió en su carta una silla de ruedas eléctrica. Esa carta cayó en manos de una persona que formaba parte de una asociación de vecinos a la que habían donado una silla de ruedas eléctrica. Así que pudimos conseguir ese regalo tan importante que el pequeño pedía en su carta.